Esta radio para coche con pantalla tácil y cámara trasera para aparcar te permite recibir llamadas en modo manos libres o ver películas y otro contenido en la pantalla.
La diferencia entre el coche que te gustaría comprar y el que puedes pagar, se llama “soñar”. Pero comprar un coche es un inversión muy seria, y hace falta tener muy claro lo que te puedes gastar, para evitar disgustos.
La odisea de comprar un coche, da igual que sea nuevo o de segunda mano, supone una ilusión. Y a veces nos dejamos arrastrar por ella. Aspiramos a un coche que no podemos pagar, quizá porque somos demasiado optimistas con los gastos, o porque pensamos que un vehículo es también un símbolo de estatus social.
Mucha gente se pasa tres años comiendo sopa sin salir de casa ni gastar dinero, para poder pagar el coche que se ha comprado.
Antes de comprar un vehículo hay que saber cuánto nos podemos gastar. El problema es que no es sencillo calcularlo. Influyen muchos factores. Por eso vamos a enseñarte a usar la regla 20/4/10 para que calcules cuánto te puedes gastar en tu coche, en función de tu sueldo y los gastos.
Nuestra compañera Christiane Drummond de TICbeat ha indagado en esta regla desarrollada por la web I will Tech you to be Rich, para calcular con exactitud cuánto puedes gastarte en un coche sin arruinarte.
La regla se llama 20/4/10 porque tiene en cuenta tres datos: tendrás que pagar el 20% del coche por adelantado, necesitarás 4 años para pagar el resto a plazos, y no debes dedicar al coche más del 10% de tu salario.
Esta radio para coche con pantalla tácil y cámara trasera para aparcar te permite recibir llamadas en modo manos libres o ver películas y otro contenido en la pantalla.
El cálculo que tienes que hacer es el siguiente:
Si la cifra resultante supera el 10% de tu salario… Busca un coche más barato…
Suena duro, pero los expertos en economía advierten que dedicar más del 10% de tu salario a los gastos del coche puede ser un riesgo si un mes tienes una avería o un accidente y te toca pagarlo a tí, o tienes otros gastos imprevistos ajenos al coche.